Martes, 15 de enero de 2013.
Ante los diversos cambios de programación y equipos de trabajo que vienen realizando sus directivos, de manera constante de un tiempo a esta parte, en la Radio Fe y Alegría, Paraguay –1300 AM, restando valiosas e importantes personas al proceso de democratización de la comunicación en Paraguay, las organizaciones abajo firmantes queremos compartir las siguientes reflexiones:
1. En Paraguay los medios masivos de comunicación se hallan en manos de oligopolios que detentan el poder económico y político por sobre los intereses de la mayoría de la sociedad paraguaya. Este modelo no tiene como prioridad informar con veracidad, más bien busca confundir, y brinda destaque a temas menos trascendentales para la vida del país.
2. La construcción de la democracia y una cultura de lo público en la ciudadanía es una tarea urgente a fin de colocar en la agenda política temas prioritarios para la sociedad paraguaya, la cual necesita no solo tener información veraz sino también contar con herramientas formativas que ayuden a separar la paja del trigo, teniendo así capacidad de criterio propio, a fin de decidir de manera informada y formada sobre los asuntos de la República.
3. Paraguay vive hoy un tiempo histórico, porque el 20 de abril de 2008, se demostró que el voto es una herramienta válida, otorgando poder, soberanía y por sobre todo, devolviendo a la población autoestima y esperanza; quedó demostrado que un cambio de gobierno junto con la alternancia política es posible, sin violencia en el marco de la institucionalidad democrática.
4. Destacamos la ola de manifestaciones espontáneas que se originaron por la mala utilización del dinero público y el manejo discrecional del Presupuesto General de la Nación por parte del Congreso, lo cual motivó masivas movilizaciones en las plazas y, al mismo tiempo, fueron replicadas en el interior del país frente a municipios con serias sospechas de malversaciones de fondos. Ambos hechos, al no provenir de personas movilizadas por las estructuras partidarias con representación parlamentaria, generaron un fuerte temor en la clase política tradicional.
5. La injusticia social en el sector campesino, donde la búsqueda de una reforma agraria integral, respetuosa de las tradiciones y las culturas de los pueblos, es un eterno pendiente desde la caída de la dictadura político-militar en 1989. A este histórico reclamo se suman los hechos registrados el 15 de junio de 2012, cuando en la zona de Marina Kue, (Curuguaty), fueron masacrados 11 campesinos y 6 policías, y más tarde (1 de diciembre), acribillado en su casa, un dirigente campesino testigo clave de los hechos, contado así con 18 compatriotas fallecidos.
6. El mecanismo legal pero de utilización ilegítima por sobre la voluntad popular, que fuera desconocida el 22 de junio de 2012 por el Congreso Nacional, removió del cargo a un Presidente de la República electo en las urnas en 2008; siendo su principal gestión la promoción de políticas públicas en los sectores más vulnerables, desde la perspectiva de los derechos humanos.
Los puntos descriptos nos llevan a pensar que otra sociedad está emergiendo y esta, a su vez tiene una fuerte disputa con la tradicional, donde los signos de los tiempos indican una prevalencia de la esperanza, la diversidad, la solidaridad, la fraternidad y la libertad. En este contexto, una emisora como la Radio Fe y Alegría, junto a las radios comunitarias de todo el país, tiene la misión histórica de acompañar esta profunda transformación socio-política que estamos viviendo en el Paraguay.
La manera en que actualmente están manejando este medio radial demuestra que quienes están en la directiva no se encuentran a la altura de las exigencias y de una realidad acuciante y dinámica, tanto en lo social, cultural, económico, político e histórico. De este modo, no contribuyen a dar voz a los sectores oprimidos y emergentes.
El inmenso esfuerzo de generar una red de trabajo con cientos de Radios Comunitarias a lo largo y ancho del país, utilizando las herramientas de educación popular y comunicación social para reflexionar sobre lo que está pasando en las comunidades, ayudar a visibilizar situaciones largamente postergadas por las autoridades de turno, y tener credibilidad en cada uno de sus espacios de programación, necesita ser capitalizado de una mejor forma.
Un medio de comunicación alternativo, como lo Radio Fe y Alegría, es una herramienta que debe estar al servicio de la sociedad como un “bien público”. Caracterizado por su variedad de contenidos educativos e informativos, debe reflejar de manera real a una sociedad multicultural como la nuestra, que todavía está buscando reconciliarse con su patrimonio cultural inmaterial.
Hacemos un llamado a la Compañía de Jesús en Paraguay (Jesuitas), que desde los tiempos de la dictadura han demostrado su opción preferencial por la libertad, la justicia social y la vida, prioritariamente de los sectores excluidos; solicitamos que la radio no se siga vaciando de contenidos y personas comprometidas, pues en las condiciones actuales, se desvirtúa la misión historia que debe tener un medio de comunicación tan importante en este momento de la vida democrática del país, como lo es Radio Fe y Alegría.
Organizaciones adheridas:
• Red de Radios Educativas del Paraguay (Plataforma de 20 Radios Comunitarias)
• Coordinadora Nacional de Organizaciones de Mujeres Trabajadoras Rurales e Indígenas (CONAMURI).
• Coordinadora por los Derechos de la Infancia y la Adolescencia – CDIA.
• TAPE’A, para el desarrollo social sostenible.
• Iniciativa por la Democratización de la Información en Paraguay. DEMOINFO (Proyecto que aglutina a organizaciones campesinas, indígenas y urbanas).