Solo cuatro casos fueron de personas que nada tenían que ver con las niñas. La sanción más alta fue de 22 años de encierro, para un hombre que abusó de su hija por varios años, y con la que tuvo tres hijos, según pruebas de ADN.
Con ello, prácticamente el 75% de los juicios con condenas, fueron personas que son conocidas o parientes de las propias víctimas de los abusos sexuales.
Penas de entre 22 y 5 años de cárcel fueron dadas este año, según nuestros archivos, por abuso sexual y violación de niñas. Las distintas penas impuestas demuestran que existe un criterio dispar, ya que en algunos casos, las mismas son bastante altas, y en otras, son mínimas, por lo que depende de los jueces y las circunstancias en que se dieron.
Igualmente, la pena más baja de este año fue de cinco años de cárcel para un funcionario militar que, en juicio oral y público, fue hallado culpable hecho de abuso sexual, donde la víctima fue su propia hija.
(Última Hora, Raúl Ramírez – 1 de octubre de 2012).
Fuente: Reseña «Niñez y Adolescencia en los Medios» de la Agencia Global de Noticias